Blogia

grandesdeportes

DERBY DECEPCIONANTE: MUCHO RUIDO Y POCO FÚTBOL

La noche copera del miércoles se presentaba como un acontecimiento excepcional. Se medían los atléticos y madridistas en un duelo con muchas heridas abiertas. El Cholo puso un once más creativo de lo habitual, con la novedad de un Diego que estuvo desafortunado en la mayoría de sus acciones. Pareció pesarle la falta de ritmo competitivo. El Madrid, por su parte, ha encontrado estabilidad con Di María como volante; aporta trabajo y sacrificio en el repliegue, y velocidad y desequilibrio cuando el equipo se prolonga en ataque. Fue el gran protagonista del encuentro. El argentino fue despedido con una ovación, como tributo a su gol y sus asistencias. En esta ocasión no encontró ninguna razón para “acomodarse” nada.

El Atlético de Madrid pareció aturdido todo el encuentro y se mostró impotente ante la superioridad de los blancos. Modric fue la brújula de su equipo y en muchas fases del encuentro fue el único que quiso jugar al fútbol, de los 22 que había en el campo. Ambos equipos se enzarzaron en grescas y pequeñas batallas que el árbitro no supo parar. No hubo ritmo de partido ni mucho fútbol, si alguien lo puso fueron Modric y Jesé. Hubo choques, patadas a destiempo, simulaciones, escupitajos e insultos. Hay ruletas rusas menos violentas que el partido de ayer.

Y ante la ausencia de fútbol, el Madrid superó en intensidad a su oponente. El Madrid desarmó a su vecino con las mismas armas con las que suele anestesiar el Atléti a sus rivales. Llegó antes a todos los rechaces y ganó todas las disputas, algo en lo que destaca el conjunto colchonero.

El balón se paraba con mucha frecuencia y el Madrid sacó partido de ello. Diego Costa, el máximo estilete rojiblanco, se acabó enzarzado en continuas riñas y tiene una alarmante predisposición a irse de los partidos. Pepe y Arbeloa parecían en su salsa, ante la posible consigna de Ancelotti de desquiciar a Costa. Los merengues consiguieron provocar una tarjeta para el brasileño, que le impide jugar la vuelta.

En esas, ante la esterilidad del ataque atlético y la superioridad del Madrid, llegaron los goles. Di María cedió a Pepe, y su disparo fue desviado por el lateral Insúa al fondo de las mallas. Ante la mirada incrédula de un desafortunado Courtois. El Madrid cantó el gol como si de una final se tratase, las heridas abiertas de las dos últimas derrotas aún escocían.

Cristiano anduvo algo perdido durante todo el encuentro, incómodo ante el marcaje de sus rivales. Lleva días sin mostrar todo su potencial, aunque le basta con muy poco para poner en aprietos a sus rivales. Benzema estuvo completamente desaparecido y su actuación dejó muy fríos a sus aficionados. 

Pepe fue uno de los triunfadores de la noche, que venció su duelo en las alcantarillas del fútbol contra Diego Costa, y que anotó además el primer gol. Jesé, la gran revelación de la temporada blanca, marcó el segundo tras la bonita asistencia de Di María y fue también ovacionado por el Bernabeú. El canario tiene el futuro en sus manos y lleva varios partidos siendo desequilibrante y decisivo. Modric, fue definitivo salvando un gol en el área blanca y llevó la manija de los blancos. El gol que salvó el croata bajo palos, hubiese supuesto el 2-1 y le hubiese dado vidilla en la eliminatoria a los atléticos. Además, para prolongar la desesperación colchonera, en la jugada siguiente, otro rechace condenó a los del Cholo Simeone. El disparo de Di Maria fue desviado por Miranda y engañó de nuevo al gafado meta belga, Thibaut Courtois. El 3-0 deja prácticamente sentenciada la eliminatoria.

Simeone no acertó en el planteamiento y los cambios de Diego, en el descanso, y de Arda Turan, después, acabaron por condenar a su Atlético. Aunque ninguno de los dos estuvo acertado, si en un partido en el que nadie juega, cambias a los pocos que lo intentan, solo te puedes aferrar a la lucha, a la gresca, a la riña y a la pelea. El Madrid se proclamó vencedor en éste y en todos los terrenos. Parecía que el tiempo no había pasado, que el bloqueo que presionaba a los atléticos en los derbis de los últimos 16 años, se hubiese vuelto a activar. El partido recordó mucho más a cualquiera de las victorias blancas, que a los últimos dos partidos que el Atlético había ganado en el Calderón. 

El último vencedor que dejó el duelo fue Casillas. El de Móstoles todavía no sabe lo que es perder ante los colchoneros. Lleva además 8 partidos imbatidos y ahora, además de santo, es talismán de su equipo. Sin embargo, el fin de semana volverá a ser relegado a la suplencia.

El partido fue feo, bronco y poco vistoso para el espectador. Las malas artes ensuciaron a dos equipos, que si es preciso, saben usarlas con maestría. El Madrid ganó con autoridad el duelo y tiene pie y medio en la final, pero perdió el fútbol, ya que ninguno de los dos equipos quiso practicarlo. Eso sí, Mourinho disfrutó por todos nosotros.

 

J.R.G

EL REGRESO DE DIEGO

Diego Ribas ha vuelto a casa. Ha vuelto al sitio donde, sencillamente, mejor ha jugado al fútbol. En su primera etapa como colchonero, consiguió ganar la Europa League frente a los leones en un marco inigualable. En Bucarest, el Atlético venció 3-0 con dos dianas de Falcao y una del propio Diego. Su gol fue una delicia que puso la guinda a una fantástica temporada y a un título ansiado.

El Cholo Simeone fue clave en la explosión del brasileño. El entrenador argentino asumió el mando del Atlético cuando el equipo se asomaba peligrosamente a los puestos del descenso. Desde el primer momento manifestó que la figura del brasileño era fundamental. Diego pasó de ser el mejor en las derrotas a ser la clave de las victorias. Asumió la responsabilidad y llevó al Atlético a lo más alto en Europa, apoyándose en los goles de Falcao y en el talento de otro futbolista diferente: Arda Turan.

Fue un final de película, pero en los títulos de crédito llegaron las malas noticias. Diego volvía a Alemania, por más que el conjunto rojiblanco intentase una opción de compra a la que el Wolsburgo no accedió. Allí empezó su divagar por el país teutón, donde sus cualidades no han sido valoradas. Su paso por equipos como Oporto, Werder Bremen (ahí sí que cuajó excelentes temporadas), Juventus y Wolsfburgo fue discreto. Solo en el Atleti ha tenido continuidad, en los demás sitios le consideraban un jugador de “estudio estadio”. Propenso a los malabarismos y a desaparecer de los partidos.

Simeone también ha sido el artífice de su fichaje, tal y como reconocía el propio brasileño en su presentación. El técnico argentino ha insistido en cada período de fichajes en la necesidad de recuperar a Diego. Al final tras varios procesos de negociación, el regreso del crack se ha consumado. Y el domingo llegó el debut soñado.

Es normal que Diego se sintiera querido en el club colchonero, ya que antes de que pisara el cesped su nombre ya había sido coreado por su afición. Gracias a ello, su confianza se dispara y eleva al Atlético a una condición superior.  Ya no es solo un equipo peleón con una efectividad demoledora, es un equipo con más clase y mayor imaginación. Todo ello puesto al servicio del equipo. Diego ha entendido  que el Cholo le pide sacrificio y trabajo en el repliegue, y descaro y atrevimiento en ataque. Acepta de buen grado las consignas de su técnico, y feliz y respaldado, dará muchas alegrías al Calderón. Como ya hizo el domingo con su gol, que desató el delirio de la grada.

Se asociará como ya hizo en su primera etapa con Arda Turan, que atesora más clase que ningún otro colchonero. Y que además es también un ejemplo en la presión. Estos dos jugadores, bien mezclados, pueden volver a formar una sociedad única. Con la colaboración del ya consagrado Koke y del incombustible Gabi. Además, Diego Costa recibirá más balones a la espalda de la defensa.

Diego Ribas ha sido más futbolista en el Atleti y el Atlético es mejor equipo con Diego. Le aporta una nueva dimensión y muchas variantes, un fútbol más vistoso y creativo. El Atlético rascara menos tobillos, dará menos gorrazos y romperá más cinturas.

Sin embrago, la contratación del brasileño ha supuesto la salida del prometedor Oliver Torres, al que el Cholo había fogueado de maravilla en Primera. Oliver en Villarreal tiene la oportunidad de convencer a todos los atléticos de que es el heredero de Diego. Desequilibrio y descaro no le faltan. Hasta entonces, los colchoneros disfrutaran del gran Diego sin olvidarse de su perla.

Diego tiene un reto pendiente: vencer al Real Madrid. En su primera etapa no lo consiguió y ahora espera poder sacarle los colores al vecino. El Atlético de Madrid siempre estuvo en su corazón y el Real Madrid en su punto de mira. No hay razón para perderse el partido de esta noche. Juega Diego.

 

J.R.G

ÉPICA VASCA

El Real Madrid perdió en Bilbao la oportunidad de superar a su eterno rival, el Barcelona, y se distanció del nuevo líder, el Atlético, en un duelo marcado por la intensidad de los leones y por la discutida expulsión de Cristiano Ronaldo.

El nuevo estadio de San Mamés conserva esa atmósfera especial de la Catedral. Un aroma a épica y a fútbol inglés. El Athletic superó al Madrid en intensidad en la puesta de escena. Modric y Xabi Alonso tardaban en recuperar y Ander Herrera asumió el mando de los leones. El jugador, con pasado zaragocista, está en una forma increíble y lleva tiempo mostrando que es uno de los medios con más proyección del fútbol español. Tiene detalles técnicos de gran maestría, solo ensuciados por una tendencia transitoria a la picaresca.

El Madrid vivió todo el partido incómodo, abrumado por la intensidad del Athletic y contagiado por el ambiente de la Catedral. Sin embargo, su pegada le tiene siempre en el partido. Cristiano necesita de bien poco para armar una ocasión, Benzema anda muy fino y Jesé se está destapando como una realidad, dejando a un lado su condición de promesa. Modric jugó muy bien en la ida en el Bernabéu pero en la vuelta nunca cogió el mando. Xabi Alonso estuvo desafortunado en la salida de balón y destacó en el juego subterráneo. A costa de algún tobillo bilbaíno.

El Athletic tapaba bien las líneas de pase y el Madrid y Diego López se complicaban con pases comprometidos en sus dominios. Hace tiempo que me he fijado en el sobrio central Laporte, que compartió la zaga con Gurpegui.

Los leones tenían el control del partido, habían conseguido llevarlo a su terreno. Llegaban con más frecuencia, pero Diego López se encargó de sofocar sus incursiones con cierta dificultad. El Madrid, sin embargo, cada vez que llega a tres cuartos de campo transmite gran sensación de peligro.

El conjunto de Carlo Ancelotti sufre cuando el repliegue del equipo rival es rápido. Necesitan espacios para que sus extremos se pongan en vuelo. En jugada estática ha perdido mucho con la baja de Özil y la suplencia de Isco. Sus ataques se vuelven previsibles y se amparan en disparos de Cristiano o en la habilidad del incipiente Jesé, ante la ausencia de Gareth Bale.

Sin embargo, a la carrera, sus flechas se disparan y mediada la segunda mitad Cristiano asistió a Jesé, una especie de calco del portugués, quien batió a Iraizoiz ante las protestas de la zaga bilbaína. (0-1) Los leones reclamaban un fuera de inexistente. El canterano puso la guinda a su gran partido con un gol, para ser después sustituido, cuando el resultado pedía su presencia. Sin embargo, el relevo que realmente cambió el encuentro fue la salida de Ibai Gómez, un jugador que se ha asentado en la banda bilbaína. Sustituyó al escurridizo Muñain, que últimamente parece algo melancólico y falto de velocidad.

 El primer balón que tocó Ibai fue una falta al borde del área. La colgó al área chica y el centro fue repelido por Sergio Ramos. Su despeje cayó a la zona donde estaba Ibai que empalmó una volea preciosa a la base del palo de Diego López. (1-1) Era el primer gol que encajaba el Madrid en 2014 y el único balón al que el portero gallego no pudo llegar en todo el encuentro.

En esas, una vez conseguido el empate llegó la otra jugada que cambió el partido. Cristiano perdió el balón en el área rival y se enzarzó en una especie de pelea de gallos con Gurpegui e Iturraspe. Los leones buscaron las cosquillas a un Cristiano que cayó demasiado fácilmente en la provocación. A Cristiano le pesaron los focos, el hecho de que todas sus acciones son miradas con lupa, y volvió a ser el protagonista de una niñería que le costó cara a la plantilla madridista. Iturraspe y Gurpegui fueron los provocadores, pero sacaron partido de la jugada. La última vez que el portugués perdió los nervios fue en la final de Copa ante el Atlético de Madrid. Donde dejó a su equipo con uno menos cuando la remontada ya era imposible.

Poco antes de que acabara el partido llegó la última ocasión del Athletic, en otra asociación entre Sergio Ramos e Ibai Gómez; esta vez el voleón fue despejado por el  portero madridista. El partido acabó en tablas y el punto no fue del todo malo para ninguno de los dos. Los leones porque jugaban contra los blancos, y el Madrid porque jugaba en la Catedral. Lo cierto es que el Athletic acabó buscando más el resultado que los madridistas.

Xabi Alonso dijo al término del partido que al árbitro le había afectado el ambiente de San Mamés, pero lo cierto es que al Madrid también. Se contagió del ambiente, de esa atmosfera única. Y el Athletic controló el juego, aunque la pegada de los blancos siempre ha valido para ganar partidos de este calibre. En los que no les hace falta jugar mejor que su adversario. Donde la épica y el fútbol van de la mano. Faltó la lluvia, eso sí.

 

J.R.G

EL ATLÉTICO, LÍDER CON AUTORIDAD

El Atlético de Madrid se colocó líder en solitario en una jornada viva, llena de alternativas y de partidos disputados. Asestó un golpe de autoridad a sus rivales y se colocó líder en solitario, algo que no hacía desde hace 18 años.

A las siete de la tarde se vestía el Calderón de etiqueta y de luto para celebrar el liderato y rendir un emotivo homenaje a Luis Aragonés. La figura del sabio ha sido tan universal que no se asocia a un solo club, pero si a algún equipo ha de hacerlo, ese es el rojiblanco.

Pasado el minuto de silencio, con la visible emoción de la afición atlética, el balón echó a rodar. El Atlético de Madrid tiene la pegada de los grandes y el espíritu luchador de los equipos pequeños.

El partido de comienzo fue disputado. La Real posee gran destreza en el manejo de balón, un grupo unido y trabajador, un central de gran nivel como Íñigo Martinez y dos zurdos exquisitos como Carlos Vela y Antoine Griezmann. El mexicano es lo más parecido a Messi que hay en la liga, y el francés ostenta gol y finura.

Pero el Atleti es un equipo experimentado, que hace del partido a partido su consigna principal, y que madura las contiendas poco a poco. Son corredores de fondo que esperan a desgastar al rival para lanzar sus cambios de ritmo más feroces. Hasta entonces, luchan, bregan, porfían, pegan y hacen todo lo que sea necesario para alcanzar un resultado positivo. Juegan al límite de la legalidad, y a veces no tienen excesivos miramientos en rebasarlo.

Y así lo hicieron en una primera parte en la que las ocasiones llegaron con cuentagotas. Villa aprovechó una cabalgada de Diego Costa por la izquierda, para rematar el centro del brasileño a gol. El balón pasó por el túnel que dibujaron las piernas del meta realista, Claudio Bravo. El guaje, que posteriormente se lesionó, le dedicó el gol a su maestro recientemente fallecido: el sabio Luis Aragonés. La Real estuvo en el partido, apoyándose en sus dos estiletes zurdos. Peligrosos siempre, el férreo entramado atlético, anestesió sus llegadas.

Hubo partido hasta que salió Diego Ribas al campo. Regresaba de un exilio difícil en Alemania, donde los entrenadores se cansan de su juego creativo a las primeras de cambio. Harto de vagar por equipos alemanes, que normalmente se inician con una W(*), Diego ha vuelto al lugar donde mejor ha jugado al fútbol, donde realmente ha sido feliz. Antes de que Ribas tuviera contacto con el balón,

Diego Costa marcó el segundo gol aprovechando los espacios de una Real necesitada. Costa, una pantera con rostro y alma de boxeador, batió a Bravo con un preciso disparo al palo largo.  

Tras el plástico remate de Miranda, el Atlético anotó el tercero. El resultado era engañoso, de acuerdo al buen nivel mostrado por la Real durante la primera partes pases de Xabi Prieto y la velocidad de los zurdos. Bien es cierto, que todas sus acometidas fueron atajadas con facilidad por uno de los mejores porteros del mundo: Thibaut Courtois.

Ahí empezó el festival de Diego. El regreso del hijo pródigo, el debut soñado. Recibió en el área con el defensa encima, con un amago sutil y una tranquilidad pasmosa lo dejó atrás para reventar la red con saña. Ese gol inauguró la fiesta y el Atlético se acordó de Aragonés, de su celebración del gol de Demetrio Albertini que suponía un empate en el Bernabeú, cuando los derbis con el vecino no se ganaban. Del penalti parado por el Mono Burgos a Figo con la cara; del último liderato en liga, hace 18 años. Se acordaron de que hace tiempo que el Atleti dejó de ser el pupas, para convertirse en uno de los mejores atléticos de la historia. Hace tiempo que el conjunto de Simeone se sacudió ese bloqueo mental que le llevó a las catacumbas del fútbol. Ahora la gente celebra que el equipo es líder, que es un grupo completo y aguerrido, con más recursos que nunca.                               

Y más ahora, con la incorporación de Diego. El brasileño promete volver a formar con Arda Turan una sociedad de muchos quilates. El talento está de vuelta en el Calderón.

  

EL VALENCIA VENCE A UN BARÇA APÁTICO

 

La derrota del Barcelona ante el Valencia dejó un clima de cierta preocupación del entorno culé. La liga está en un pañuelo y cualquier tropiezo puede ser decisivo. El Atlético se alzó como líder en solitario y el Madrid alcanzó al Barça en la segunda posición. Los blaugranas esperan que la sombra de la derrota no sea muy alargada y su afición no quiere volver a ver los fantasmas del pasado. La pitada quizá fuera injusta para un equipo que ha perdido tan pocos puntos en lo que lleva de liga. Pero en el fútbol solo prima la actualidad. El partido a partido que se está imponiendo en la competición tiene mucho de tópico pero algo de cierto. Las victorias pasadas sirven de poco y solo se aprecia el partido más reciente.

Todo esto puede condicionar al Tata Martino como entrenador del Barcelona y eso es lo que debió de pensar el argentino hace unos días, cuando el Camp Nou dedicó una sonora pitada a su equipo. Lo cierto es que el conjunto blaugrana pecó de falta de ambición. Y su juego, aproximadamente desde el minuto 40 de la primera parte, dejó mucho que desear. En el seno barcelonista, no se ha hecho caso de las señales de mal juego que se han dejado ver en momentos puntuales de la temporada. Pero, probablemente, la parroquia catalana no silbaba solo por eso. La gente del Barça sabe que en el Camp Nou no se pita por perder, sino por cómo se pierde.

Pongámonos en antecedentes. El Barça se encontró pronto con el primer gol, en un centro de Messi que remató Alexis en semifallo. La fortuna quiso que el balón se elevara de un modo circense por encima de Diego Alves, un gato con mechas. El curso del encuentro parecía de lo más tranquilo para el Barça. Cuajó 20 minutos en los que mostró sus virtudes: presión rápida arriba, recuperación fácil de balón y despliegue de los extremos.

Las ocasiones llegaban con cierta continuidad, el campo estaba húmedo y rápido, como les gusta a los barcelonistas, y sólo un par de estiradas del portero brasileño impedían que la ventaja blaugrana aumentara. En el Camp Nou, cuando se gana uno cero y se fallan un par de ocasiones claras, esta vez en respectivas arrancadas de Messi y remates de Alexis, se origina un tímido murmullo. La parroquia blaugrana ha visto muchos partidos que se han escapado por no cerrar el marcador cuando se tiene la oportunidad. A la memoria de muchos barcelonistas viene el gol de Tamudo que le privó de la liga al entonces equipo de Frank Rikjaard. El equipo del Tata parecía ser consciente de que con paciencia el gol de la tranquilidad llegaría.

 Sin embargo, no fue así y el Barça mostró los mismos errores de toda la temporada. Llegada la mitad de la primera parte, el Barça empezó a tardar más en la recuperación. El Valencia encontró un filón por la banda derecha y Feghouli parecía dispuesto a retar a Jordi Alba a un vals vertiginoso. El Valencia aprovechó también la rapidez del campo y le duraban cada vez más las posesiones. Messi, que al principio, parecía destinado a marcar las diferencias, fue retrasando cada vez más su posición.

Señal inequívoca de que algo iba mal. Messi es letal pasados los tres cuartos de campo, pero si se retrasa, pierde capacidad para decidir los encuentros. Que Messi reciba el balón tan lejos del peligro es un lujo que ningún equipo debería permitirse. Lo puede hacer, porque el argentino es el mejor asistiendo, pasando e incluso organizando; pero es más peligroso cerca de las áreas. Para hacer todo ello y para marcar.

El Valencia se desplegó por los costados y apretó a un Barça que vio como su arreón inicial iba siendo sofocado. Xavi perdió peso en el partido, Cesc andaba desaparecido, Busquets se despistó en la salida de balón y Pedro y Alexis no conectaban con Messi a la hora de desequilibrar. El equipo se partía con facilidad y tenía que preocuparse de recuperar, en lugar de decidir cómo administrar las posesiones.

Y en un error de Busquets en la entrega, Parejo recuperó y cedió a un descarado Feghouli que una vez llegado a línea de fondo cedió atrás. Parejo, astuto y en mejor forma que nunca, siguió la jugada y batió con autoridad a Valdés. El meta blaugrana miró a un Jordi Alba afectado que había perdido la posición ante la acometida del francés. El gol del Camp Nou fue acogido con frialdad, la grada clamó con el mismo silencio que en el homenaje dedicado a Luis Aragonés.  

Es curioso el caso de Feghouli, al que el público de Mestalla silba con regularidad. No es de extrañar, por tanto, que el francés rinda mucho más alejado de la capital del Turia. Y el otro día fue junto con Piatti el hombre más importante de los valencianistas. Hay que reconocer que Pizzi ha sabido reconstruir el ánimo de un jugador que andaba alicaído.

El partido llegó al descanso. Pero la reanudación albergó a un Barça igual de somnoliento que al final del primer envite.  El Valencia siguió poniendo en jaque a la defensa, especialmente en un error en la salida de Valdés y en la marca de Dani Alves. Piatti, el más pequeño de la liga, se elevó por encima de todos para hacer un gol que puso patas arriba la competición. El Camp Nou reaccionó y animó a su equipo. Dos minutos más tarde, el Barça, impulsado por Messi, empató el partido.

El argentino tenía ante sí la oportunidad de empatar el partido y acabar con su racha de 4 meses sin anotar en liga. El árbitro además, le había regalado el penalti.

Messi se frotó el pelo y se mostró impasible cuando Diego Alves se acercaba para intimidarle. El argentino lo ajustó a la escuadra y el portero ché no llegó. La grada respiró aliviada, aunque el espejismo duró poco.

La defensa del Barça mostró una fragilidad evidente, que hizo recordar a los partidos del Ajax y del Athletic de Bilbao; parecía un púgil herido, que poco tardó en desfondarse, dócil a la hora de besar la lona. El Valencia volvió a aparecer en la jugada siguiente ante un Barça despistado. Parejo jugó un partido espléndido. Feghouli fue un puñal por los costados y esta vez apareció Alcácer, que había pasado de perseguir sombras, en la primera parte, a ser la sombra perseguida. El centro del francés lo remató a gol el valenciano y la grada volvió a enmudecer.

Un halo de pesimismo cubrió el Camp Nou. El Barça tenía que volver a remar a contracorriente, pero no poseía ni los medios ni la actitud para hacerlo. Estaba aturdido y lento, muy lento en la circulación. Perdió varios balones en el centro que mostraron las debilidades de una zaga remolona a la hora de recular. El Valencia se replegaba con maestría y tenía armas para volver a herir a la retaguardia culé.

Messi, que seguía actuando veinte metros más atrás de lo que debiera, perdió un par de balones peligrosos en el centro. Las ocasiones no llegaban de forma fluida en ninguna de las áreas. El Barça volvió a evidenciar ciertas carencias en la circulación, su rival escupía los centros de los extremos culés con solvencia y sus contras inquietaban a la grada culé.

La salida al campo de Iniesta se tradujo con mayor velocidad en la circulación, y aunque solo él y Messi parecían capaces de desestabilizar la compleja muralla defensiva del Valencia. Solo una preciosa combinación entre Messi, Alves e Iniesta, al primer toque, levantó la expectación generalizada de los culés. Fue una doble pared en menos de dos segundos. Messi aceleró tras la dejada de tacón de Iniesta y nadie pudo seguirle, dribló a su último adversario pero su remate con la derecha fue repelido por Diego Alves. La parada con el pie del portero brasileño recordó a la de Casillas ante Robben en la final del Mundial. No hubo tiempo para más y se consumó la derrota blaugrana.

El partido tuvo dos fases. En la primera, el Barça demostró las virtudes que ha exhibido este año. Ha perdido en velocidad de circulación, en control de los partidos y en tiempo de posesión. Pero ha ganado en efectividad, velocidad en los extremos y en la aparición de los teóricos secundarios. Actores de reparto que están cada vez más acostumbrados a los primeros planos.

Sin embargo, tras el primer gol valencianista, se reabrieron viejas heridas en la plantilla blaugrana. Pierden la posición con facilidad, exponen una fragilidad defensiva impropia de un equipo que opta a todo y parece faltar un mediocampista; se echa de menos cada vez más a Thiago Alcántara. O eso o el Tata empieza a dar más protagonismo a la figura de Iniesta, en posible detrimento de Cesc Fábregas; pero es necesario que el técnico ha ga coincidir más a menudo a Xavi y Andrés.

Entre otras cosas, porque si Messi ha de hacer de Iniesta y Xavi, no siempre puede hacer también de Messi.

 

La grada del Camp Nou suele silbar más por las formas que por el contenido. Y la afición,probablemente injusta,es soberana, no sólo importa que se gane sino cómo se gane. Pero al menos hay que hacer bien una de las dos cosas.

 

Por Jorge Rodríguez Gascón.

EL DEPOR GANA CON DOS MENOS A UN GETAFE LÁNGUIDO

GETEFE 0-2 DEPORTIVO DE LA CORUÑA

El Getafe está considerado un equipo alegre, con criterio a la hora de manejar el balón y gente muy peligrosa arriba. Poco vimos ayer, con la excepción de los centros de Pedro León. El equipo de Michel no sólo perdió, sino que dio una mala imagen y recibió los pitidos entendibles de su afición. Es el segundo partido que pierde en el Coliseo, donde había ganado todo salvo en la visita del Barcelona. En aquel partido la derrota fue justificable y el público aplaudió a los suyos. No puede decirse lo mismo del partido de ayer.

El Getafe salió con la voluntad de manejar el encuentro, pero en los primeros minutos el centro del campo del Depor fue mejor. Con dos jugadores fuertes que además tienen un toque de balón más que aceptable en el medio centro, como son Sergio y Antonio Tomás, y las ayudas de un todoterreno como es Juan Rodríguez (ayer interior derecho) los coruñeses tienen garantías en una posición vital. Empezaron a llegar por la banda izquierda, que es una de las mejores de la liga, y tras un par de avisos tímidos, Filipe puso un balón fenomenal en la cabeza de Mista, que no perdonó y anotó su primer gol de la temporada.

El partido cambió poco después con la expulsión de Riki, que volvía al campo en el que se dio a conocer en primera división. La primera amarilla fue por simular un penalti, que desde luego no era penalti, aunque tampoco creo que hubiese suficiente simulación como para una tarjeta. La segunda fue por un intentó de rematar con la mano, aunque el balón tocó su cabeza.

El Depor se encerró en su campo y la falta de imaginación del Getafe se hizo evidente. No hubo ninguna reacción por parte de los madrileños, que apenas tuvieron ocasiones claras ante un equipo disciplinado, bien colocado en el terreno de juego y con facilidad para salir al contrataque.  

A pesar de los cambios de Michel en el descanso, con la entrada de Gavilán y Pedro Ríos, que indicaba la intención de jugar por las bandas, el partido siguió como estaba: un Getafe dormido, escaso de personalidad e iniciativas, estrellándose contra una defensa seria que no se cansaba de achicar balones y se aventuraba a salir al ataque. En una de esas aventuras un mal tiro de Guardado se convirtió en un buen pase a Mista, que cedió el gol a Filipe. El brasileño redondeaba así su partido número setenta y dos consecutivo en la liga. Es difícil entender que Guardiola se haya gastado veinticinco millones en Chygrinski y no quisiese pagar quince o veinte por este lateral que ayer no sólo marcó un gol y dio el otro sino que además pudo con Pedro León, el mejor jugador del Getafe.

La expulsión de Sergio mediado el segundo tiempo dejó al Depor con dos menos. Hubo una ligera reacción y Gavilán llegó a inquietar a Aranzubia. Pero el partido ya era de los gallegos, que confiará en lo que haga hoy el Zaragoza en Valencia para acabar la jornada cuarto. Hay que destacar a Juan Rodríguez, un jugador polivalente que tiene en la potencia su mejor virtud y se ha hecho un fijo en los planes de Lotina, y a Mista, que fue determinante por primera vez en mucho tiempo y puede aportar mucho a un equipo con tan buenos centradores como Filipe o Guardado.

El Getafe dejó muchas dudas. Le faltó intensidad y orgullo. Es el segundo partido consecutivo que pierde ante un equipo que acaba con menos de once jugadores. Ayer dio la sensación de que se conformaba con eso.

EL BARÇA SE EXHIBE A COSTA DEL ZARAGOZA. 6-1

EL BARÇA SE EXHIBE A COSTA DEL ZARAGOZA. 6-1

 

El Barça está de vuelta. Lo ha demostrado esta noche en el Camp Nou, es probable que en parte gracias a la inestimable ayuda del Zaragoza, y en concreto del defensivo planteamiento de Marcelino, pero ha jugado el mejor partido de la temporada.

La derrota ante el Rubin hacía que el choque frente al conjunto maño fuese de vital importancia y el Barça se sentía responsabilizado ante el encuentro. Algo que se notó en los primeros minutos, en los que el Barça tenía la posesión pero no profundizaba. El balón no llegaba a Xavi desde los centrales y la velocidad de juego era demasiado lenta como para sorprender a los maños, que estaban replegados a partir del círculo central.

Pero este Barça ha ganado recursos y se encargó de demostrarlo Ibrahimovic en dos balones al espacio: el primero lo controló y lo dejó para Messi que disparó y se topó con Carrizo, y el segundo bajó el balón y a la media vuelta sacó un potente chut que desvió de nuevo el meta argentino a corner.

Y en un corner llegó el primer gol blaugrana en el minuto 24, Messi se ofreció en corto, se dio la vuelta y con un centro magistral habilitó la llegada de Keita, que mandó el balón al fondo de las mallas. Marcelino vio como su planteamiento se rompía.

El Barça comenzó a cambiar el ritmo en tres cuartos de campo y el juego se volvía impredeciblemente preciso. Y en otra jugada a balón parado Ibrahimovic marcó el segundo, tras un potente lanzamiento de falta en el que Carrizo pecó de manos blandas. Antes del lanzamiento le dije a mi padre “que la tire Ibra, que la tire Ibra, te digo que es gol” él contestó “no creo, Xavi le pegaría mejor, pero espero que no entre”. Al final yo tuve la razón.

Messi nos deleitó con un par de quiebros de ensueño, volvió loco a Javi Paredes y a todo el Zaragoza que miraba incrédulo las fechorías del astro argentino. Antes de terminar la primera mitad Xavi le dio un balón de tiralíneas a Ibrahimovic que cedió a Keita y este consiguió el tercer gol blaugrana. Tras el descanso se intercambiaron los papeles y esta vez fue Keita quien habilitó a Ibra para hacer el segundo gol del sueco en el partido. Luego llegaría el gol de Messi, que tuvo oportunidades para haber hecho alguno más, en una plástica vaselina, también intentó alguna anteriormente, y el tercero de Keita rematando a la red tras un corner y culminando una extraordinaria actuación.

Jorge López maquilló el resultado con su gol.

Y todo en medio de una magistral sinfonía del Barça que alcanzó el ansiado juego del año pasado, con variantes positivas, como el juego de Ibra o la salida de balón de Chygrinsky añadida a la ya conocida de Piqué, y generó muchas ocasiones a lo largo del partido.

Ibrahimovic jugó su mejor partido hasta la fecha con el Barça. Se mostró desequilibrante, cayó a bandas, jugó muy bien de espaldas, dio asistencias, buscó la portería e hizo un doblete.

El Zaragoza no pudo hacer nada, básicamente porque no estuvo en condiciones de disputar el choque y salió con la sensación de que el partido estaba perdido, algo que es señal inequívoca de que el resultado no será favorable.

Messi volvió a ser el del Barça y, en palabras de Carlos Martínez, “se sobrepuso del jet-lag que le produce jugar con Argentina”. Dribló, peleó, asistió y marcó, al final y tras mucho intentarlo. Se liberó de las críticas de la prensa argentina y de Maradona, más recientes. De hecho si Messi fuera Maradona probablemente ya habría salido mandando a los periodistas que le criticaron “a chuparla”.

Pero Messi no es Maradona, y tiene mejor educación que el pelusa; y, afortunadamente para Leo, el Barça no es Argentina ni Pep es Maradona. Ni falta que hace.

UN MADRID SIN RECURSOS

UN MADRID SIN RECURSOS


El Real Madrid cedió un empate en el Molinón en un encuentro que por planteamiento, era idóneo para el Madrid, que otro Madrid, con más pegada que Raúl, hubiese ganado sin despeinarse. Pero solo estaba Raúl arriba. Y Kaká, que cada día se conforma con menos, teniendo en cuenta que su juego en los últimos partidos, está resultando intrascendente.

La primera mitad estuvo dominada por el Sporting, puso el juego, las ganas y las ocasiones. Miguel de las Cuevas tuvo la ocasión más clara, pero una magnifica y casi previsible reacción de Casillas evito el tanto asturiano. El Madrid no se sentía cómodo, Xabi Alonso no llevaba la manija, Mahmadou Diarra no recuperaba todo lo que debía y a nadie se le veía en facultades como para desatascar el partido, sólo un disparo duro de Kaká hizo temblar a la parroquia del Sporting en la primera mitad. El Madrid demostró los mismos problemas de siempre (falta de identidad fubolística, poco juego, poca profundidad) pero le faltó lo que le hace ser único y endiablademente peligroso, su pegada.

El descanso hizo cambiar al Madrid, que pese a no encontrar un juego magistral se fue acercando poco a poco a la portería de Juan Pablo, quien estuvo a la altura y desbarato todos los intentos merengues. Granero fue quien la tuvo más cerca con un mano a mano que desbarató el meta del Sporting con el pie izquierdo y desde el suelo. Parecía que el asedio acabaría dando sus frutos pero no fue así y el equipo que dirige Manolo Preciado no se descompuso y tuteo al Madrid, que tampoco dispuso de muchas oportunidades, sino que renunció al juego y buscó balones aéreos que no inquietaron ni mucho menos a los asturianos. Lo intentaron sin éxito Granero, Raúl y Van der Vaart de falta.

Y al final reparto de puntos en el Molinón que sabrá a mucho a los asturianos y a poco a los madrileños, que pueden situarse a tres puntos del Barça si hoy vence al Zaragoza en El Camp Nou.


Por su parte en el Sánchez Pizjuán Kameni se doctoró con una excelente actuación que desespero a futbolistas y aficionados del Sevilla que vieron escapar dos puntos que les hubiesen venido de perlas para arrebatarle el segundo puesto al Madrid. El empate a cero fue claramente injusto, pero de justicia no vive el fútbol sino de acierto. Como conclusión la jornada resultará fantástica para el Barça si consigue vencer en al Zaragoza de Marcelino, pues las distancias se han ampliado.

LA CHAMPIONS DEJA EN MAL LUGAR A LOS ESPAÑOLES

LA CHAMPIONS DEJA EN MAL LUGAR A LOS ESPAÑOLES

 

La jornada de Champions ha resultado aciaga para los conjuntos de nuestra liga, a excepción del Sevilla que con más pegada que brillantez se llevo los tres puntos en Alemania frente al Stuttgart. Por su parte el vigente campeón, el FCBarcelona fue la gran sorpresa de la jornada, tras perder 1-2 frente al Rubin Kazan, en un partido malo del equipo de Pep Guardiola. Le faltó velocidad y profundidad al juego blaugrana y suerte, pues el Barça realizó 23 tiros a puerta por 3 en contra, en los que encajó dos goles. El "PepTeam" tuvo que remar a contracorriente, tras el primer gol de los rusos, y pese al empate de Ibrahimovic tras el descanso, el Rubin se volvió a poner por delante en otra contra.

El Real Madrid también cayó en casa, y lo hizo frente al veterano Milán de Leonardo, que se encomió al talento de Pirlo, Seedorf y Pato para vencer a un Madrid sin profundidad ni juego, con un Kaká apagado y un Xabi Alonso sin presencia que es quien debería elaborar en este equipo.

Por su parte el Atlético recibió la humillación, previsible de todas formas, del Chelsea de Ancelotti que liderado por un gran Frank Lampard y el goleador Kalou, que anotó dos tantos. Para mí gusto el Chelsea tiene la mejor la plantilla de la competición. En los otros partidos destacar la derrota del Liverpool, la empate del Inter y la victoria del Oporto con goles de Hulk, además de la consagración del Sevilla como aspirante al titulo.

EL BARÇA SE ATASCA ANTE UN BUEN VALENCIA

Está claro que la liga no es una cosa de dos. O al menos por ahora. Nos dimos cuenta en el partido del Sánchez Pizjuán en el que el Sevilla fue muy superior al Madrid. Nos hemos dado cuenta hoy en el partido de Mestalla, en el que el Barça ha sufrido y ha podido perder frente al Valencia. Al final el punto que se lleva le sirve para mantener el liderato en solitario.

                No ha funcionado el Barça. No hemos visto la rápidez en el juego a la que nos ha acostumbrado, y sólo se ha visto a sus estrellas en acciones aisladas. Y el Barça ya lleva unos días sin deslumbrar. Hay que reconocer el gran mérito del Valencia, un equipo que ha salido sin ningún complejo, pese a lo que puede acomplejar jugar contra el mejor equipo del mundo y no poder contar con David Villa. Presionó muy arriba y le quitó el balón al Barça. A lo mejor esta es la clave para frenar al tricampeón. Ayudó que Guardiola no alinease a ningún delantero puro (jugaron Iniesta, Pedro y Messi). Ibrahimovic estaba tocado y no jugó ni un minuto. Se ha visto que Emery puede formar un bloque sólido ideal para grandes partidos. Pese a no estar Villa, el Valencia tiene muchísimo peligro arriba. En la primera parte, el Barça ha estado irreconocible. El Valencia ha jugado con intensidad, ha tomado la iniciativa y ha podido adelantarse. Hemos visto buenas jugadas de Pablo Hernández, que cada día tiene mayor presencia, combinando con un fantástico Silva, que jugó más de medio partido lesionado, y con un siempre peligroso Mata. Banega no deja de demostrar que ha dado un salto de calidad. Cada día tiene más personalidad, lo que se ve no sólo en su desparpajo a la hora de pedir el balón y atreverse a tomar responsabilidades, sino también en la intensidad con la que defiende y se pelea con los rivales. También la defensa ha estado muy bien, sobretodo en los laterales, con un Miguel sensacional y un Bruno que ha hecho pasar desapercibido a Messi. La primera llegada del Barça fue al borde del descanso, con un pase de Alves al desmarque de Iniesta.

                En la segunda parte hemos visto una mejoría del Barça, provocada en parte por el bajón físico del Valencia. Parece que Iniesta empieza a volver a su nivel. Ha sido lo mejor del Barça. Messi hizo un partido discreto, tal vez cansado por los partidos con Argentina, en los que no dio mejor rendimiento. Salió Bojan por Pedro, que tuvo la ocasión más clara del líder, y Busquets por Xavi, un cambio más que sorprendente, teniendo en cuenta que estaban en el campo Touré y Keita, que no están a su mejor nivel. Silva también perdonó en un remate a bocajarro tras un centro de Mathieu. Se pidió la expulsión de Banega, por un manotazo a Alves. Si el brasileño fuese menos teatrero, los árbitros lo tomarían más en serio. Es un jugador eléctrico con una resistencia envidiable, pero no tiene inteligencia. Tira la mayor parte de los libres directos en el Barça, cuando Xavi es sin duda un tirador más efectivo. 

                Al final el empate a cero puede considerarse un resultado justo. El Valencia es un equipo que se crece en las grandes citas, y que pese a mantener la imagen de equipo rudo con jugadores como Albelda y Marchena (que hoy no ha jugado) ahora tiene el jugador que siempre ha necesitado para hacer llegar el balón a sus jugadores ofensivos: Banega. Es normal que el Barça no pueda mantener todos los partidos el nivel con el que ha maravillado. Su juego lento y previsible tanto hoy como ante el Almería no es preocupante todavía. Es el segundo partido que no gana esta temporada, y ambos han sido a domicilio ante muy buenos equipos (Inter y Valencia). Sin embargo, Guardiola tiene un par de cosas en las que pensar.

EL MADRID SUFRE PARA GANAR AL VALLADOLID

El Madrid ha dado hoy la misma sensación que en prácticamente todos los partidos de esta temporada. No sabe exactamente a qué juega, aunque parece que sabe a qué quiere jugar. Tiene tendencia a descompensarse (hoy menos que en otras ocasiones, porque Granero y Van der Vaart defienden más que Kakà y Ronaldo), y comete errores en defensa que hacen que cualquier equipo pueda crearles ocasiones claras con cierta facilidad. Pero es un equipo que media tres goles por partido, que no necesita nada para golearte. Lo han pagado varios equipos esta temporada, y hoy lo ha pagado el Valladolid. El equipo de Mendilibar salió dormido, y en los primeros veinte minutos, de largo los mejores del Madrid, ya perdía 2-0. Y los dos goles los ha marcado Raúl. El siete se ha convertido en un jugador muy diferente al de hace unos años. Es un cazagoles, un rematador que siempre busca la situación ventajosa: el rechace dentro del área, el remate a bocajarro, si puede ser a un toque mucho mejor. Sus dos goles han sido así. Nadie le marca en el área, se desmarca y define a un toque. Dos golazos. La grada pensó que sería una victoria fácil. Pero a los veinte minutos empezó a crecer el Valladolid. A ello contribuyó que Granero, que había guiado al Madrid en el inicio, fuese apagándose poco a poco, y su equipo con él.

                El golazo de Naizet de libre directo dio vida al partido, y los pucelanos se fueron animando. Diego Costa hizo un partido sensacional y volvió loca a la defensa madridista. Sin embargo, en la última jugada de la primera parte, Marcelo puso el 3-1 con un tiro con la derecha desde la frontal. Era su manera de resarcirse del partido de Sevilla, en el que Navas lo dejó en evidencia. Es posible que sea mejor interior que lateral.

                En la segunda parte todo siguió igual. Un Madrid pobre en la circulación de balón, pese al buen partido de Xabi Alonso. Lass no tuvo su día y parece que no está al nivel de principio de temporada. La imprecisión hizo estallar algunos pitidos en el Bernabeu, sobretodo cuando Diego Costa aprovechó un regalo de Xabi para hacerle un caño a Pepe y darle el 3-2 a Marcos. Tuvo sus ocasiones para empatar el Valladolid, que dio mucha mejor imagen en ataque que en defensa.

                Salieron Kakà e Higuaín, crecido tras su debut con gol con Argentina, por Benzema, que no acaba de convencer a nadie en el Bernabeu, y Van der Vaart, que no hizo mal partido. El Pipita sentenció el partido con una preciosa vaselina tras pase de Xabi. A nadie le extraña ya ver partidos disputados, en los que el Madrid no domina pero que acaba goleando, y así está a un punto del Barça, tres por delante de Sevilla y Depor.

 EL SEVILLA PINCHA ANTE UN DEPOR QUE SUEÑA CON EUROPA

                Por otra parte, el Depor sorprendió a un Sevilla que llegaba crecido, casi eufórico. Pero la liga es muy larga y lo de hoy es un toque de atención. El golazo de Juan Rodríguez dio la victoria a los gallegos, que hicieron un partido muy serio. Lotina planteó un partido duro y táctico y los jugadores deportivistas hicieron del orden su mejor arma para detener el impetú que destrozó al Madrid. En el duelo entre Filipe y Navas, el brasileño se va como claro ganador. También hay que destacar el buen encuentro de Manuel Pablo, un jugador que podría haber llegado a ser el lateral de la selección de no ser por aquella fractura de tibia y peroné.

                El Deportivo iguala al Sevilla en la tabla y presenta su candidatura a luchar por los puestos europeos. Es un equipo que Lotina ha ido formando con los años, que destaca por el buen manejo de balón, la solidez defensiva y la efectividad en las jugadas a balón parado. Para el Sevilla, la derrota puede ser útil. No es la primera vez que después de un buen partido en Sevilla se dispara la euforia y se oyen declaraciones irrespetuosas. Sin duda se trata de un equipazo que debería disputar la liga, pero es importante que mantengan los pies en el suelo.

A PROPÓSITO DE MESSI

A PROPÓSITO DE MESSI



Messi está siendo muy criticado por la prensa argentina, en referencia a sus actuaciones con el combinado albiceleste. Se ha hablado de que es incapaz de coger la responsabilidad en un equipo que se había encomiado a él, que desaparece y se borra de lospartidos. Para mi es un problema más bien del equipo, que no sabe ni a lo que juega ni con qué medios. Evidentemente Argentina es un equipo con pegada, parece mentira viendo quienes han hecho los goles que han clasificado a la albiceleste: Bolatti, Palermo (4º delantero), pero que tiene un problema increíble en la creación, pues ni Gago ni Mascherano son creadores, ni Verón está como para llevar el juego de una de las selecciones más renombradas delmundo.

Nadie crea situaciones de peligro, y el ritmo de juego no sorprende al rival.

Y ese es el problema de Messi. Que Argentina no tiene equipo, no tiene juego porque nadie lo distribuye. Que Leo tiene que hacer de Xavi e Iniesta y no le da para ser Messi. Aparte de la responsabilidad que tiene en Argentina, al ser un país en el que se vive el fútbol como en casi ningún otro lugar.

Las cosas no le salen a Messi porque no le salen a nadie en la albiceleste, porque su fútbol es tan pobre que casi nadie rinde a su nivel normal, porque cuando tiene el balón lo juega sin profundidad y sin velocidad y porque le cuesta recuperar el balón una eternidad, y cuando lo tiene no sabe que hacer con él. Es un equipo sin orden táctico y sin rigor a la hora del replige.

Pero no es solo problema de Leo, bastaria con revisar las actuaciones de Agüero, Tevéz o Milito para darnos cuenta de que tampoco han rendido al nivel de sus clubes.

Pero las criticas se han centrado con Messi, algo que es, por otra parte, compresible teniendo en cuenta quien es el mejor jugador del mundo, y en quien está apoyada la responsabilidad del equipo.

Y porque por mucho que “el Diego” les mande a los peridistas “a chuparla” debería reflexionar y pensar que todas y cada una de las criticas se veian justificadas con el pobre juego de Argentina . Que se han clasificado gracias a la mayor de las fortunas y que, ni aun jugando a su mejor nivel, serían justificables sus palabras.

Por suerte Messi no siempre vive en la selección y regresó ayer para incorporarse al Barça donde sí es querido, y donde Guardiola le espera con los brazos abiertos, Pep le quiere feliz y en Barcelona lo está, casualidad o no en Argentina no suele esbozar muchas sonrisas.


Jorge Rodríguez Gascón

 

EL DILEMA DE LIPPI

EL DILEMA DE LIPPI

 

Aparte de las fechorías del primer ministro Berlusconi, hay un asunto que tiene dividido a Italia, y no es otro que el hecho de que Lippi no llame a Cassano para la selección.

Todo el mundo en Italia tiene una opinión respecto a este problema. Y la mayoria creen que “Il Talentino” deberia ser convocado para el próximo mundial.  Pero su relación con Lippi no es ni mucho menos buena, pues Lippi no es partidario del juego de calidad, sino del que da resultados. Y eso se contradice con el fútbol de Cassano.

Cassano lleva 3 años en la Sampdoria, en la que ha encontrado la estabilidad emocional y deportiva que le permite sacar su talento a relucir. Es el líder de un equipo aguerrido y con pegada, en el que Antonio destila clase en cada jugada, en cada asistencia y cada gol; que no son pocos.

Además está saliendo con una  chica genovesa que le ha atado en corto, algo que no le ha venido nada mal al bueno de Cassano, que ya no protagoniza escándalos fuera de los terrenos de juego y los provoca en las defensas rivales.

Mi opinión en el asunto es clara, Cassano debe ir a la selección, porque nadie esta al nivel de Il Talentino ahora mismo y porque su rendimiento lo merece. Es más Pazzini el compañero de delantera de Antonio en la Sampdoria debería ser convocado con él.

Pero veremos si los problemas personales que imagino que Lippi tendrá con Cassano (sino todo este asunto no
se entiende)  impiden su seleccionado para el Mundial de Sudáfrica. De momento ya nos deleita Cassano con sus actuaciones en la Samp. En un equipo que marcha segundo a dos puntos del Inter y con Cassano como figura más destacada de la competición.

 

 

 

PEDRO, LA REVELACIÓN DEL BARÇA.

 

Hace dos años, durante la pretemporada en Irlanda del Barça, me fijé en un chico que había llevado Rikjaard, Pedrito. Me sonaba de haberlo visto en alguna convocatoria pero no estaba seguro.

Estaba ilusionado por el equipo que había hecho el Barça, con Titi Henry como fichaje estrella, y seguí aquella pretemporada esperando el debut del francés con un gol de penalti creo recordar.

Antes de que sacaran a Henry estaba jugando ese tal Pedrito y volvía locos a sus adversarios con bicicletas y salidas hacia los dos lados.

Le decía a mi hermano: “Ese tio es muy bueno” y el me respondía “Que vá, si no sabe si es zurdo o diestro. Le he visto un par de partidos y todavía no se con qué pierna le da, yo creo que él tampoco lo sabe”. Un par de años después, con la confianza de Guardiola y ficha del primer equipo Pedrito, como quiere él que le sigan llamando, ha marcado goles importantes y con ambas piernas, algo que le recuerdo siempre que puedo a mi hermano. Para mi
sorpresa Pedro es zurdo, pese a haber marcado tres de estos cuatro goles con la diestra.

Anotó frente al Athletic en la supercopa de España, contra el Shacktar en la supercopa de Europa de Mónaco, contra el Dinamo en Champions y frente al Almería en el último partido de liga.

La consolidación de Pedro es un hecho y afronta la temporada como una de las alternativas y uno de los recursos de los que dispondra el Barça, prueba de ello son sus grandes actuaciones hasta el momento.

 

 

EL REGRESO DE LAFITA MARCA LA VISITA DEL RACING A LA ROMAREDA

 

El Zaragoza regresa a la competición después del parón provocado por los partidos internacionales y lo hace con la noticia de la vuelta de Lafita a la Romareda, en un partido que será especial para el canterano pues podrá disfrutar tras un verano asfixiante
para él.

Lotina avisaba “el gran perjudicado de toda esta situación es Lafita” y durante el mes y medio de competición apenas se ha visto al futbolista por los terrenos de juego, a excepción de una anectódica intervención en el Vicente Calderón, situación provocada por las discrepancias entre Lendoiro y Bandrés.

Pero el martirio para Lafita ha acabado y ahora tendrá que concentrarse en lo que mejor se le da: jugar a fútbol, y esperemos que la afición del Zaragoza no le pite por una situación que él no ha provocado, y de la que el no era más que la victima, como decía
Lotina.


A la recuperación de Lafita se añade la de Ander Herrera, procedente del mundial sub 20 en el que la selección
quedó eliminada en cuartos frente a Italia.

Tras la derrota frente al Atlético el equipo maño buscará dar una alegría a su afición y recobrar el vuelo.

Por su parte el Racing vendrá  a la Romareda con la intención de sacar los 3 puntos y de esta manera, rebajar los nervios de una afición intranquila, sobretodo teniendo en cuenta que es el cuarto equpo más goleado del campeonato.

 

 

 

Jorge Rodríguez Gascón

 

 

 

EL BARÇA CONTINÚA MANDANDO.

EL BARÇA CONTINÚA MANDANDO.

Tras la disputa de las 6 primeras jornadas el Barcelona es el líder en solitario de la liga con un juego brillante unos dias y espeso otras, pero mostrándose contundente y solido, con un arranque de Ibrahimovic histórico, 5 goles en las 5 primeras jornadas, y con un Messi estelar, dejando a un lado la maravillosa contribución de Xavi y de Piqué al juego blaugrana. El Real Madrid se sitúa segundo a tres puntos del Barcelona con un juego poco vistoso pero eficaz y con la misma pegada de siempre, pero manteniendo los mismos errores del pasado; mala defensa a balón parado, falta de atención defensiva y poca fluidez en el juego, provocando minutos de desconcierto en la parroquia madridista. Ronaldo rinde a muy buen nivel y su eficacia goleadora es tremenda, pero una lesion frente al Marsella en la segunda jornada de la Champions le obligó a perderse el partido frente al Sevilla. Benzema y Kaká demuestran buen nivel, aunque el francés de manera inconstante. En el Sancez Pizjuán (2-1) el Madrid sufrió la derrota frente al conjunto hispalense, provocado por las constantes acometidas del conjunto hispalense gracias a un magistral Navas y a un atrevido Perotti. Goles de Navas y Renato, por el Sevilla, y de Pepe, para el Madrid. Tras el partido el Sevilla empata a puntos al Madrid y se coloca a 3 del Barça. Un Sevilla con físico y recursos que ya ha hecho levantar el ego del orgulloso Del Nido.

Cuarto se encuentra el Deportivo con un juego de combinación de escuela y un gran Filipe Luis. Valerón está jugando a muy buen nivel, siendo dosificado por Lotina de manera inteligente. A un punto del Depor está el Valencia, que en visperas de su enfrentamiento contra el lider acaba de perder a Villa y es duda para el encuentro, con un juego práctico y plástico cuando Silva, Mata y Villa están inspirados. La defensa está ofreciendo dudas que veremos si Emery es capaz de resolver.

 Dos equipos que han protagonizado un buen arranque de liga son el Mallorca y el Athletic que se encuentran empatados a puntos en la 6ª y 7ª posición, con la noticia de Muñaín que frente al Valladolid se estrenó y ya es el goleador más joven de la Liga. En 8ª posición está el Getafe que pese a protagonizar un buen arranque de competición no se ha consolidado y rinde a peor nivel fuera de casa. Pedro León está jugando muy bien, con libertad y capacidad de desborde.

En un pañuelo se encuentran el Sporting, el Espanyol, el Osasuna y el Zaragoza, que pese a las dificultades iniciales se han conseguido rehacer y se encuentran en la zona templada de la liga. Es conveniente destacar el buen juego de Jorge López y Abel Aguilár por parte del conjunto maño. El Atletico se encuentra 14ª en un arranque de liga bastante convulso, que ha hecho plantearse la destitución de Abel a la parroquía rojiblanca, a todos menos a Cerezo. Lo cuál es envidiable, por otra parte. La victoria frente al Zaragoza y la vuelta de Asenjo hace que el aficionado se encuentre más optimista de cara al futuro. Por detrás del equipo rojiblanco están el Tenerife, el Valladolid y el Racing, que se asoman al descenso en el que se encuentra el Villarreal que ha comenzado mal la liga en cuanto a resultados, desafortunado de cara al gol, pese a practicar el juego vistoso que le caracteriza. Le acompañan en posiciones de descenso el Málaga y el Xeréz.

Se confirma que la liga no era cosa de dos, el Sevilla se acerca a los grandes y veremos si el Zaragoza se estabiliza, algo que vendria bien dadas las fechas y la ilusion de todos los maños.

Jorge Rodríguez Gascón

 

LIGA BBVA. COMIENZA EL ESPECTÁCULO.

La liga comenzaba a finales de agosto con grandes expectativas, debido a que grandes jugadores habían llegado a la liga española y a que la vuelta a la competición nos hace más ameno, sin duda alguna, el regreso a la rutina tras el descanso veraniego.

Los fichajes de Florentino: C.Ronaldo, Kaká, Benzema, Xabi Alonso, Albiol y Granero prometen poner en duda la hegemonía del equipo campeón: el FCBarcelona que tras la resaca de un año de ensueño se enfrenta al reto de mantener el nivel de la temporada pasada, tarea nada sencilla. El equipo de Pep se ha renovado poco pero bien, y siguiendo las pretensiones del técnico de Santpedor, algo que a primera vista me hace presagiar buenos resultados.  Ibrahimovic aportará cosas distintas a Eto´o y según mi opinión no hay mejor delantero para el Barça que el sueco.

Mientras tanto el Sevilla se mantiene como tercer espada con la incorporación de lujo de Álvaro Negredo y la de Zokora que aportara estabilidad al centro del campo. Del Nido puede estar más orgulloso que nunca de haber formado una plantilla competitiva de cara a todas las competiciones. Así como el Villarreal que se ha renovado con el fichaje de Nilmar, un talentoso delantero carioca, pero tendra que afrontar un año complicado tras la marcha de Pellegrini al Madrid.

El Valencia consiguió mantener a sus estrellas, probablemente su mejor negocio durante el verano, y buscará acceder a Europa y jugar a buen nivel, para ello se ha reforzado de manera inteligente aunque con escasez, algo similar a lo que ha hecho el Atlético de Madrid que aparte de mantener al Kun y a Forlán, ha fichado a Asenjo (espero que sea dueño de la portería del Calderón durante años)  y Juanito, fichado del Betis; además de recuperar a Jurado, que por calidad debería tener un puesto de titular. El Zaragoza ha regresado a la competición que se merece y se ha reforzado bien de cara a su objetivo de la permanencia, al igual que el Getafe que destacando la incorporación de Pedro León buscará seguir en Primera a toda costa.

Objetivo por el que también pelearan el aguerrido Osasuna de Camacho, un batallador Sporting, el novato Xerez de Ziganda, un fiel a la competición como el Valladolid de Mendinibar, el debutante Tenerife, el por fín estabilizado Mallorca de Manzano, el estético Almeria de Huego Sánchez, el rehabilitado Racing, la sorpresa del año pasado: el Málaga que, al menos al comienzo, optará por cotas más bajas y por último el Athletic de Caparrós que cuenta con el joven Muñáin como última joya de la cantera de Lezama.

 

Asi se presentó una liga que intentará consagrarse como la más competitiva del mundo, algo que hará peligrar la hegemonía de la liga inglesa en los últimos años.

Jorge Rodríguez Gascón

REAPERTURA DEL BLOG

REAPERTURA DEL BLOG

A petición de mi padre se vuelve a abrir la página e iré comentando y haciendo crónicas de los partidos de la liga. Con el tiempo que me dejen mis estudios y mis vicios, pero intentaré mantener cierta regularidad.

Un saludo.

FEDERER GANA ROLAND GARROS

FEDERER GANA ROLAND GARROS

El número dos del mundo venció de forma contundente en la final de París frente al sueco Robert Soderling por  6-1, 7-6 y 6-4.

Fue un partido bastante fácil para el suizo, quizá uno de los más asequibles que haya tenido en esta edición de Roland Garros. Soderling se lo puso demasiado fácil y ya en el primer set demostró que la presión le iba a jugar una mala pasada. En la primera manga, el sueco tan sólo pudo ganar su saque en una ocasión, permitiendo al helvético ganar el primer parcial por 6-1 sin despeinarse.

Algo más difícil se lo puso en el segundo set, cuando ambos finalistas lograron mantener su servicio hasta el final y hubo que ir al ’tie-break’, en donde nuevamente quedó reflejada la clase de Federer y la inexperiencia de Soderling, 7-1 por la vía rápida.

En el último ‘round’, el gigante sueco empezó a soltar el brazo y a jugarse cada punto a golpes ganadores. Pero tan sólo le sirvió para maquillar el resultado final del partido. Roger ya había puesto la directa y esta vez no se le iba a escapar el torneo que más quebraderos de cabeza le ha dado. 6-4, set, partido y Roland Garros.

Tras el punto definitivo, Federer rompió a llorar de alegría. Esa rabia contenida por haber perdido las tres veces anteriores y haber alcanzado la gloria en el cuarto intento salió de lo más profundo de su interior.

Con esta victoria el suizo iguala el récord que ostentaba Pete Sampras, dandóle la posibilidad de convertirse en el mejor tenista de la historia en el próximo Grand Slam: Wimbledon, su fortín particular solo invadido por Rafa Nadal en la pasada edición.

Jorge Rodríguez, Óscar Sánchez, Marina Terrado.

EL MADRID PERDONÓ EN LA SEGUNDA PARTE LO QUE EL BARÇA EN LA PRIMERA

 

Messi se convirtió en el salvador del Barça en un partido que será recordado durante muchos años. El Barcelona salvó los muebles inextremis con un Messi espectacular que se graduó como superestrella marcando 3 goles en el derbi. El Madrid perdonó en la segunda parte como el Barça había perdonado en la primera.

Se adelantó Van Nistelrooy y el Barça, ansioso, consiguió el empate por medio de Messi en una jugada colectiva bastante buena y vistosa. El Barça llevaba el control sin embargo su defensa: el 3-4-3, le dio algún que otro quebradero de cabeza. El Barça se volvió a ver como el conjunto merengue, haciendo mucho menos que ellos, se adelantaba de nuevo en el marcador y fue tras un penalty bastante riguroso que ejecutó Van Nistelrooy. Oleguer vio tarjeta amarilla, una tarjeta que a la postre resulto ser decisiva.

El Barça a partir de ahí luchó y peleo y en un barullo y gran jugada de Ronaldinho en el área, el argentino Messi consiguió su segundo gol ante la mirada de los centrales del Madrid. El conjunto catalán se creció y disfruto de buenas ocasiones que no pudo materializar dada la inspiración de Casillas. Su juego en esa fase del partido fue espectacular. Eto´o apareció por todos lados, Ronnie se mostró más y los medios llevaron el peso del partido.

Parecía que todo iba a acabar así hasta el descanso, cuando Oleguer Presas, que demostró que no puede ser titular en el Barça, vio la segunda amarilla tras una infantil entrada sobre Gago, poco constante en la noche del derbi. Esta expulsión catapultó al Madrid en la segunda parte y disfrutó de tres o cuatro magníficas oportunidades que resolvió Valdés, reivindicando su nivel, bastante cuestionado en la ida de la Champions frente al Liverpool. El Madrid fue a por el partido y en un centro desde la derecha Sergio Ramos cabeceó el balón al fondo de la red.

Pero el F.C. Barcelona no estaba dispuesto a rendirse y el conjunto de Rikjaard demostró lo que es ser un campeón, lucho y desarmó la defensa del Madrid una y mil veces, pero el empeñó no era suficiente, y cuando todo parecía acabado, Messi; el chico que hace un anuncio de adidas proclamando los problemas de crecimiento de su niñez; el chico que fue etiquetado por Maradona como su sucesor; el chico que llegó a la Masia con 12 años procedente de Argentina; el chico que destrozó Stamford Bridge en la Champions y se dio a conocer; el chico que fue llamado “teatrero” por el siempre polémico José Mourinho: ese chico marcó en el minuto 91 con una jugada personal en la que dejó a varios defensas en la cuneta y a Casillas tirado en el césped frustrado por el golazo del argentino. Messi fue hacia el corner y señaló una camiseta en la que ponía: “Fuerza, tío”, dedicada a su tío que sufre una depresión. Fue ese chico el que se convirtió en el salvador del Barça y que dio un empate que puede ser decisivo para el conjunto catalán y para el Madrid también, un Real que realizo, hay que reconocerlo, un muy buen partido.